A través del Arte: Tributo a Diego Armando Maradona

Repasamos algunas de las representaciones más icónicas del astro argentino, como tributo y homenaje tras su reciente fallecimiento.

El día 25 de noviembre del año 2020, supimos que se nos fue uno de los más grandes del mundo del fútbol, El Pelusa, Barrilete Cósmico, D10S... tantos y tantos apodos que cosechó durante su vida un jugador inigualable: Diego Armando Maradona.

Es por ello que he decidido realizar un pequeño tributo a su memoria, enfocando todo ello a lo que ha supuesto su figura en Argentina, y en una ciudad ubicada al sur de Italia, donde lo elevó a niveles estratosféricos tanto a nivel futbolístico como social, Nápoles.

Sin más, paso a mostrar una serie de representaciones del mismo, que mostrarán la importancia que tuvo en la sociedad argentina y napolitana.

Por un lado, en Argentina, adquirió un gran cariño por parte de la población debido a su paso por Boca Juniors, donde ganó la primera división de Argentina y, sobre todo, por la cosecha de la Copa Mundial de la FIFA México 1986.

El mundo nunca olvidará aquel 22 de junio de 1986, Estadio Azteca, Argentina vs Inglaterra... el resto es historia.

Todo esto va a más en Argentina, sintiendo los argentinos tanta devoción por el jugador que, a modo de parodia, una serie de aficionados decidieron fundar la Iglesia Maradoniana, la cual cuenta con sus propios mandamientos, fechas indicadas e imágenes devocionales: 

LOS 10 MANDAMIENTOS MARADONIANOS

1. La pelota no se mancha, como dijo D10S en su homenaje.

2. Amar al fútbol por sobre todas las cosas.

3. Declarar tu amor incondicional por Diego y el buen fútbol.

4. Defender la camiseta Argentina, respetando a la gente.

5. Difundir los milagros de Diego en todo el universo.

6. Honrar los templos donde predicó y sus mantos sagrados.

7. No proclamar a Diego en nombre de un único club.

8. Predicar los principios de la Iglesia Maradoniana.

9. Llevar Diego como segundo nombre y ponérselo a tu hijo.

10. No ser cabeza de termo y que no se te escape la tortuga.

Por otro lado, en Nápoles, no iba a ser menor esta adoración al astro argentino. Dicha idolatría se debe a que, durante su etapa de nueve años en la ciudad del sur de Italia, consiguió los dos únicos scudettos que ostenta el Nápoles (1886-87 y 1989-90), y el único torneo internacional de la historia del club, la Copa de la UEFA (1988-89).

Sin más, nos deja un jugador único, inigualable, un enamorado del balón que, con su legado, ha sido capaz de unir a la sociedad por un amor conjunto: el fútbol.

D.E.P.

Autor: Carlos Valdés

Editado por: Iván T.